
El Día Internacional del Libro es una conmemoración celebrada cada 23 de abril a nivel mundial con el objetivo de fomentar la lectura, la industria editorial y la protección de la propiedad intelectual por medio del derecho de autor. Desde 1988, es una celebración internacional promovida por la UNESCO. El 15 de junio de 1989 se inició en varios países, y en 2010 la celebración ya había alcanzado más de cien.
Se trata de un día simbólico para la literatura mundial, ya que ese día, en 1616, fallecieron: Cervantes, Shakespeare y Garcilaso de la Vega. La fecha también coincide con el nacimiento o la muerte de otros autores prominentes, como Maurice Druon, Haldor K.Laxness, Vladimir Nabokov, Josep Pla, Manuel Mejía Vallejo y William Wordsworth. El Día Internacional del Libro se creó en honor a estos autores fallecidos.
La Unión Internacional de Editores propuso esta fecha a la UNESCO, con el objetivo de fomentar la cultura y la protección de la propiedad intelectual por medio del derecho de autor. La Conferencia General de la UNESCO la aprobó en París el 15 de noviembre de 1995, por lo que a partir de dicha fecha el 23 de abril es el «Día Internacional del Libro y del Derecho de Autor».
Ante las dificultades que los padres encuentran para aficionar a los niños a la lectura, cabe hacerse la siguiente pregunta: ¿realmente es necesario?, ¿por qué deben leer los niños?
La lectura, ya sea de cuentos, libros, cómics o revistas aporta múltiples beneficios para el niño. A continuación os contamos qué ventajas obtiene el niño cuando genera el hábito de leer.
10 beneficios de la lectura para los niños
1. El placer: el niño puede encontrar una verdadera pasión en los libros y una afición que le reportará placer.
2. Evasión creativa: los libros son herramientas que permiten a los niños ‘viajar’ a otros lugares, transportarse a otras dimensiones donde puede imaginar a través de las palabras cómo son los protagonistas o los entornos. Es aquí donde entra en juego la creatividad, la fantasía y la ilusión.
3. Habilidades lingüísticas: el niño aprende nuevo vocabulario, a usar correctamente el lenguaje e, incluso, a escribir sin faltas de ortografía.
4. Ejercita el cerebro: la acción de leer es una tarea que representa cierta complejidad para el cerebro, por lo tanto el niño está estimulando habilidades como la memoria o el entendimiento.
5. Conocimiento del mundo: los libros en sí mismos son un aprendizaje ya que el niño puede conocer aspectos sobre el mundo casi sin darse cuenta a medida que pasa las páginas.
6. Conocimiento de los demás: los libros ayudan a los niños a ponerse en el lugar de los demás, a conocer los sentimientos y los puntos de vista de otras personas. Esto hace que el niño trabaje la empatía y sea más flexible.
7. Fortalece la capacidad de concentración y atención: el niño que se ‘encierra’ tras las páginas de un libro, fomenta su capacidad de concentración
8. Practica la lectura mecánica y lectura comprensiva: esto tiene una repercusión muy directa en su rendimiento escolar. Un niño que lee bien estudiará mejor y por lo tanto tendrá mejores resultados académicos.
9. Fomenta su curiosidad: se plantea nuevas preguntas, siente más inquietud y quiere seguir alimentándola, buscando más información y encontrando más respuestas.
10. Un amigo fiel para toda la vida: el niño que adquiere el hábito de la lectura tendrá un compañero en el que encontrar respuestas o consuelo en los malos y los buenos momentos. Precisamente en esos momentos en los que el niño tiene dificultades, si es lector puede encontrar alivio o el consejo que quizás no encuentre en su entorno.
Hasta la semana que viene, bye
#díadellibro